Hay veces que huelo una palabra rara. Hasta ese momento olía normal, pero de repente se torna informe y blanda, y no sé qué hacer con ella. Le salen bultos por todas partes, como si hubiesen metido las letras en un saco y lo hubiesen agitado.
Entonces la cojo, me la pongo en la boca y la saboreo lentamente como a un caramelo, y así se va toda la pátina de empalague que se le había pegado, y queda sólo el centro, la esencia, la verdad.
Buen encadenamiento de sinestesias, pero, ¿No estaría mejor hacer de "rara" adjetivo predicativo y no especificativo? - Huelo rara una palabra... así se explica mejor la transición desde la normalidad olfativa anterior.
ResponderEliminarTu tío J.